Santo Domingo, RD.- De acuerdo con el informe preliminar que esta semana dio a conocer el Banco Central de la República Dominicana, el Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE) para enero-abril de 2020 reveló que la economía dominicana cayó en -7.5% en relación a igual periodo del año pasado.

De todas las actividades económicas del país, ha sido el turismo en sus renglones de Hoteles, Bares y Restaurantes el que más ha caído registrando un crecimiento interanual negativo de -34%, seguido de la Construcción (-24%), la Salud (-12.4%), Minas y Canteras (-11.4%) y otras actividades de servicios (-9.7%).

El informe detalla que la variación acumulada promedio del Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE) de los primeros cuatro meses del año es el resultado de tasas de crecimiento interanuales de 4.7% en enero y 5.3% en febrero, así como de -9.4% y -29.8% en marzo y abril, respectivamente.

En lo que respecta a las contracciones registradas en los meses de marzo y de forma más pronunciada en abril, las mismas se explican por el impacto de las medidas de prevención ante la propagación del coronavirus (COVID-19), que contemplan el distanciamiento social, la suspensión de operaciones en actividades económicas no esenciales, cierre de las fronteras del país por aire, mar y tierra, toque de queda desde final de la tarde hasta el amanecer y limitaciones en el transporte público.

El turismo será crucial para volver a la normalidad

Para el Banco Central de la República Dominicana, el sector turístico y su aporte a través de la actividad Hoteles, Bares y Restaurantes será crucial para la normalización de las actividades productivas, aunque le tome más tiempo recuperar el dinamismo de años recientes.

Explica que el turismo es una fuente primordial de generación de divisas, responsable de una alta proporción de las exportaciones totales de bienes y servicios y de la inversión extranjera directa.

En adición, agrega, esta actividad incide en la economía a través de la generación de empleos directos e indirectos y la demanda de insumos agropecuarios, industriales y energéticos, entre otros.

Cómo eran los aportes del turismo

De acuerdo con estadísticas del Ministerio de Turismo de la República Dominicana, de 2012 a 2019 la industria turística local había generado 43 mil millones de dólares en beneficio de la economía y la estabilidad. El año pasado, a pesar de la campaña mediática negativa desatada contra el país en Estados Unidos, República Dominicana mantuvo el liderazgo de crecimiento promedio del(PIB) de toda la región, aumentando un 5.1%.

Abril como punto más crítico de la crisis

Logo del Banco Central RDEl Banco Central de la República Dominicana cree que la caída registrada en abril será el punto más crítico de la crisis actual, tal y como ha sido la experiencia sincronizada en la mayoría de las economías del mundo, debido fundamentalmente a las medidas de confinamiento ante la pandemia previamente mencionadas.

Las actividades que se han visto más afectadas en términos del valor agregado real durante el período enero-abril de 2020 son Hoteles, Bares y Restaurantes (-34.1%), Construcción (-24.5%), Minería (-11.4%), Otros Servicios (-9.7%), Transporte y Almacenamiento (-9.6%), Zonas Francas (-8.8%) y Manufactura Local (-5.2%). Cabe resaltar que a pesar de las restricciones implementadas a raíz del COVID-19, algunos sectores económicos continuaron exhibiendo un desempeño positivo, tales como: Salud (12.4%), Servicios Financieros (9.8%), Agropecuario (5.2%), Actividades Inmobiliarias (4.9%), Comunicaciones (4.8%) y Energía y Agua (3.5%), mitigando parcialmente los efectos adversos del confinamiento preventivo sobre el crecimiento económico.

El Banco Central proyecta que en lo sucesivo la economía dominicana experimente una recuperación en forma de “V”, retornando en el corto plazo a los niveles de expansión promedio experimentados previo a la implementación de las medidas de contención de la propagación del virus, lo que le permitiría cerrar el año en torno a un crecimiento neutral. En ese tenor, resulta importante destacar los fuertes fundamentos macroeconómicos de la economía dominicana, así como su probada resiliencia para superar de forma exitosa choques adversos externos e internos.

Asegura que la capacidad de recuperación de la economía dominicana es posible en gran medida por la composición diversificada de su aparato productivo y los encadenamientos entre las actividades económicas de impulso y de arrastre que generan un efecto multiplicador en la economía.

Tal es el caso de la Construcción, un sector que se ha caracterizado por ser determinante de los puntos de inflexión de las fluctuaciones cíclicas de la actividad económica, por ser el componente principal de la inversión doméstica en la demanda agregada, con una gran capacidad de arrastre del resto de actividades económicas, incluyendo de forma particular a la industria en su conjunto. Se espera que una vez más la Construcción sea de gran incidencia en el repunte de la economía de la Republica Dominicana en la segunda mitad de 2020 y durante el año 2021.

Sede del Banco Central de la República Dominicana
Sede del Banco Central de la República Dominicana

Un aspecto fundamental que impulsará y catalizará el proceso de recuperación de la economía en los próximos meses son las amplias facilidades crediticias propiciadas por las medidas de flexibilización monetaria adoptadas que han puesto a la disposición de las empresas y hogares más de RD$120,000 millones de pesos y US$622 millones, contribuyendo a la disminución en las tasas de interés para el acceso al financiamiento de los agentes económicos. Cabe resaltar el comportamiento registrado hasta la fecha por el crédito a los sectores productivos, el cual al cierre del mes de mayo exhibe un crecimiento interanual de 14.0% (RD$124,445.4 millones adicionales con respecto a mayo del pasado año), muy por encima del crecimiento del PIB nominal.