Aviones despegando.Foto Pixabay

Santo Domingo, RD. –  La llegada al Congreso Nacional del proyecto de ley para el Fomento y Competitividad de la Aviación Civil Nacional abre una ventana de esperanza para que los dominicanos y turistas tengan nuevas opciones de vuelos y de boletos aéreos más baratos hacia y desde el país y augura una etapa de fortalecimiento y expansión de la aviación civil dominicana.

La decisión del gobierno coloca la reformulación de todo el sistema impositivo y de incentivos para el sector de la aviación nacional a un paso de ser una realidad, ahora en manos de los legisladores.

Desbloquearía también el panorama para que el Estado dominicano firme un acuerdo de cielos abiertos con Estados Unidos que hasta las mismas autoridades estadounidenses han promovido y negociado con el gobierno.

El proyecto que cursa ya en el Senado de la República crearía un marco regulatorio de promoción, fomento y competitividad de la Aviación Civil Nacional con medidas como la eliminación del pago del impuesto sobre la transferencia de bienes industrializados y servicios (ITBIS) en la venta de vuelos completos por parte de operadoras dominicanas a empresas en el exterior, para vuelos originados en el extranjero con destino hacia la República.

Para el país, el fomento y promoción de la aviación nacional lograría la disminución de los precios de los pasajes aéreos, aumentar el número de visitantes, establecer nuevas rutas domésticas e internacionales, fortalecer a República Dominicana como punto de conexión y promover la competitividad de la industria aérea nacional a través de incentivos fiscales.

La promesa da un paso hacia adelante

Justo el día en que se estrenó la línea aérea Arajet en septiembre pasado, el presidente de la República anunció que se proponía someter una ley al Congreso Nacional para eliminar las barreras fiscales que impedía el desarrollo de nuevas líneas aéreas locales y alcanzar competitividad de la aviación internacional dominicana.

Para el presidente Abinader era clara la necesidad de un apoyo estatal a la aviación civil nacional porque a su juicio “el Estado dominicano no está recibiendo beneficios, pero sí dejando de incentivar la competencia al establecer medidas sin ningún sentido que frenan el desarrollo de la aviación internacional”.

Se caería el absurdo de un acuerdo de cielos abiertos con EEUU

Omar Chahin Lama, presidente de la ADLA
Omar Chahin Lama, presidente de la ADLA.

Son históricos los reclamos de la Asociación Dominicana de Líneas Aéreas (Adla) para que se establezcan en el país políticas estatales que promuevan el fortalecimiento y crecimiento de la oferta aérea nacional con un régimen especial de incentivos fiscales que les permita competir con las líneas aéreas de otros países.

Omar Chahín, presidente de Adla advertía que, si se aprobaba un cielo abierto sin ningún tipo de compensación para las líneas aéreas dominicanas, sin ningún tipo de igualdad con los impuestos que pagan las líneas aéreas extranjeras, estarían compitiendo en una desigualdad muy grande.

En ese sentido, destacó que las líneas aéreas norteamericanas gozan en sus propios estados de mejores condiciones que les permiten vender sus boletos más baratos al público, que al final de cuenta, es lo que se desea.

De ahí que para Adla sería un absurdo firmar un convenio de cielos abiertos con Estados Unidos sin antes arreglar la situación impositiva que afecta a las líneas aéreas dominicanas.

Desde principios de año tomó fuerza una corriente de opinión para la firma de ese acuerdo a tal punto que la propia Embajada de Estados Unidos en el país se pronunció a favor de la firma del convenio.

En septiembre pasado el presidente Luis Abinader revelaba que las negociaciones estaban avanzadas y que el proceso podría culminar en unos dos meses.

El mandatario expresó, en una reunión con directivos de medios de comunicación, que impulsará un proyecto de administración para fortalecer la industria de la aviación en República Dominicana con una ley de “hub”, para que las compañías aéreas nacionales e internacionales fortalezcan sus actividades en el país.

Pero justo salía en esos momentos la nueva línea aérea Arajet y el presidente de la República conversaba con los empresarios del sector y reveló que estaba convencido de cambiar el marco regulatorio en que operaban esas empresas al decir que “aquí lo que se necesita es competencia entre las líneas aéreas y eso nos va a ayudar”.

Implementación del proyecto

Una vez se haga realidad el nuevo proyecto de Ley de promoción y fomento de la aviación civil dominicana, será la Junta de Aviación Civil (JAC) la responsable de analizar y determinar las necesidades de desarrollo de nuevas rutas aéreas, e intensificar y profundizar las rutas existentes, conforme a la necesidad de la competitividad aérea, que impacte al desarrollo del turismo y la economía dominicana.

El anteproyecto establece que las empresas del sector interesadas en acogerse a los beneficios fiscales de la ley enviarán sus expedientes y solicitudes a la JAC los cuales serán evaluados pudiendo aplicar estudios de factibilidad y los criterios técnicos necesario.

Asimismo, la JAC será la responsable de delimitar y acordar con las empresas mediante acuerdo, las rutas críticas a ser desarrolladas en los primeros cinco (5) años de la entrada en vigor de la presente ley.

 

En un comunicado la JAC explicó que será el Ministerio de Hacienda el órgano responsable de emitir una no objeción a la aprobación de las solicitudes de las empresas del sector interesadas en recibir los beneficios fiscales de la presente ley.