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Glasgow, Escocia. – (10 de nov 2021). -Momento crucial se vive en la Cumbre Climática de las Naciones Unidas en Glasgow (Cop26) en medio del debate por una declaración final que en su segunda propuesta no satisface a muchos países participantes ni a ambientalistas.

De acuerdo a los reportes de prensa que cuentan sobre los detalles de los debates, el segundo borrador solo introduce compromisos «de mínimos» para acabar con los combustibles fósiles.

Las COP es la reunión anual de los Gobiernos para debatir la crisis climática. Se presentan los planes y se espera que se firmen acuerdos. Casi todos los países del mundo cuentan con representantes.

Aunque los gobiernos participantes aceptaron incorporar en la propuesta de documento la necesidad de frenar los financiamientos al carbón, el gas y el petróleo, consideradas energías sucias, los expertos advierten es que si se habla de justicia climática, la propuesta se queda corta dado que no aborda la financiación de los países más vulnerables ante la crisis climática.

Ante la nueva propuesta de acuerdo Greenpeace considera que aún no está a la altura del momento

La primera versión de borrador se conoció la mañana del lunes y este se presentó una segunda propuesta que tampoco convence a muchos dato que no

Para la organización Ecologistas en Acción la Presidencia británica de la COP26 presenta un borrador de texto final que supone una tibia declaración de intenciones y ningún avance en las negociaciones.

Para Greenpeace la propuesta aún no está a la altura del momento considerando que debe ser mucho más sólido en materia de financiación y adaptación, y debe incluir cifras reales y un plan de ejecución para que los países más ricos apoyen a las naciones menos desarrolladas

Pese al rechazo y el bloqueo férreo de países como Australia Arabia Saudí, finalmente se ha incluyó una mención mínima a las energías sucias, después de que los observadores internacionales criticasen el texto del primer borrador por no aludir a esta cuestión.

La preocupación es que se trata solo de un borrador y la alusión al problema de la contaminación por energías sucias es de tan sólo una línea por lo que no está asegurado que en el documento final que ratifiquen las Parte se mantenga.

Los ministros de Medio Ambiente reunidos en la Cop26 ahora tienen tres días para mejorar el texto y hacer el trabajo aquí en Glasgow en lugar de dar una patada hacia delante al clima una vez más.

Jennifer Morgan, directora ejecutiva de Greenpeace Internacional, considera que el borrador de texto final no es un plan para resolver la crisis climática, es un acuerdo para que todos crucemos los dedos y esperemos que salga lo mejor posible.

“Es una petición para que los países, quizás, puedan hacer más el próximo año. Pero esto no es suficiente y los negociadores no deberían ni pensar en salir de esta ciudad hasta que hayan llegado a un acuerdo a la altura del momento. Porque, con toda seguridad, este no lo está”, dijo Morgan para indicar que se acaba de conocer un estudio histórico que muestra que nos dirigimos a 2,4 °C de calentamiento.

“El objetivo de esta conferencia siempre fue reducir esa cifra a 1,5 °C, pero con este texto los líderes mundiales están dejándolo para el año que viene. Si esto es lo mejor que se les ocurre, no es de extrañar que los niños y niñas de hoy estén furiosos con ellos”, advirtió la activista.

Juan Pablo Osornio, jefe de la delegación de Greenpeace en la COP26, de su lado asegura que el proyecto de texto actual no está a la altura de lo que se necesita para mantener el objetivo de 1,5 °C, pero aún quedan varios días en la COP26 y todavía hay mucho en juego.

Considera que la decisión final que se tome en Glasgow debe comprometerse a eliminar progresivamente todos los nuevos combustibles fósiles, apoyando una transición justa hacia las energías renovables.