Santo Domingo, RD.- Duarte no fue hombre de armas ni un militar, pero la fecha de su bautizo ha dado paso a que la Iglesia en la que lo convirtieron al cristianismo dejara de ser el templo comunitario del barrio en el que creció.
Santa Bárbara de los Hombres del Mar fue la primera parroquia del Nuevo Mundo. Se levantó sobre una cantera que fue testigo de más de 600 años de historia que fundieron la cultura dominicana. Santuario de clemencias de los marineros de tiempos coloniales y reservorio de sus ofrendas al tocar el suelo de la primera colonia española en América y fue, en su momento, asilo eclesiástico por disposición del Papa Clemente XIV.
Generaciones y generaciones construyeron desde el templo su comunidad cristiana y hasta fue cementerio y fosa común para las víctimas de las pestes de siglos pasados y hasta aún reguarda la pila bautismal en que bautizaron a Juan Pablo Duarte, Padre de la Patria. Tal es un impronta que fue declarada patrimonio cultural de la humanidad (UNESCO 1990).
Pero ya no es la parroquia del barrio Santa Bárbara. Hoy es la sede de la diócesis castrense de la República Dominicana. Al frente del Obispado Castrense se encuentra el obispo castrense que, por disposición de la Santa Sede, es el arzobispo metropolitano “pro tempore” de Santo Domingo, su excelencia reverendísima monseñor Francisco Ozoria Acosta.
La prensa recoge el disgusto de vecinos y de comerciantes por lo que acontece luego de que el pasado 4 de febrero el templo histórico pasara formalmente a ser parte del patrimonio de las Fuerzas Armadas.
Los planes que espera el barrio de Santa Bárbara
En el 2014 la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (OISOE) comenzó los estudios para el rescate del templo. Un conflicto con la oficina de Patrimonio Monumental atrasó el proceso, pero cinco años más tarde se logró restaurar, no solo la iglesia, sino todo su entorno y construir algunas obras con carácter comunitario.
Mucha gente celebró la noticia de que en las obras adjuntas se construía un centro cultural para enseñar a los niños a tocar instrumentos musicales, con la finalidad de que la comunidad tenga su propia orquesta infantil.
En el centro ubicado al Este de la parroquia los infantes recibirían educación sobre la música autóctona y ritmos como el merengue, el carabiné, la mangulina, entre otras, para mantener vivas la raíces y tradiciones culturales dominicanas.
En un enclave turístico, se prometió asimismo una escuela de arte culinario, con la finalidad de que los habitantes de Santa Bárbara aprendieran a desarrollar sus propios platos con las características de la zona y, de esa manera, desarrollen festivales gastronómicos y así obtener los recursos para mantener el lugar.
La OISOE hablaba de una plaza abierta al intervenir también la plaza para que la comunidad pudiera desarrollar sus actividades cotidianas, bodas, cumpleaños, reuniones, ferias y hasta conciertos acordes con la obra y apegados a las buenas costumbres. Vecinos denuncian que sí se realizaban bodas pero de gente rica que no es del barrio.}
En lo que se convirtió el otrora templo comunitario
El pasado día 4 de febrero, a propósito del aniversario del bautismo de Juan Pablo Duarte, la Iglesia Santa Bárbara de los Hombres de la Mar fue constituida como catedral y sede de la Diócesis Castrense de la República Dominicana bajo la dirección de Mons. Francisco Ozoria Acosta, arzobispo metropolitano de Santo Domingo.
En la ceremonia el obispo castrense congregó a su clero, junto a obispos y sacerdotes invitados de la Arquidiócesis de Santo Domingo y de las demás diócesis del país.
La primera dama de la República, Cándida Montilla de Medina, asistió al acto en el que estaban en primera fila el ministro de Defensa, Rubén Paulino Sem, el jefe de la Policía, Ney Aldrin Bautista, el director de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado( OISOE), Francisco Pagán, entre otros funcionarios públicos y oficiales militares.
De nuevo, desde su templo centenario y sin temor a quedar sepultada en sus escombros, la Mártir de Nicomedia (hoy Izmit en Turkía) vigila y protege a las almas que habitan la zona a toda la Ciudad Colonial y su entorno, pero en lo adelante debe hacerlo compartiendo su casa con nuevas deidades. Al declarar como Catedral Castrense al Santuario de Santa Bárbara, se coronaron los patrones de las tres instituciones militares y el cuerpo de la Policía Nacional (PN): San Miguel Arcángel del Ejército de la Rep. Dom, Nuestra Señora del Amparo de la Armada Dominicana, Nuestra Señora del Carmen de la Fuerza Aérea y San Judas Tadeo de la PN.
